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Automedicación

Se entiende por automedicación el hecho de tomar medicamentos por iniciativa propia del paciente, o por recomendación de un amigo, familiar, entre otros, los cuales no tienen conocimiento en medicina y se basan en la propia experiencia.

El problema son las consecuencias que este acto puede traer, de las cuales los pacientes en su mayoría no se dan cuenta. Se relaciona a una serie de complicaciones tales como:

• Enmascaramiento de una enfermedad: llevando a diagnósticos tardíos de un problema serio.
• Aparición de efectos adversos: los pacientes no saben de estos efectos, toman más medicamentos para contrarrestar estos efectos, cayendo al final en un círculo vicioso.
• Prolongación o agravamiento de la enfermedad.
• Resistencia a los medicamentos empleados.
• Facilitar el contagio de enfermedades.
• Fomentar la drogodependencia.

El ejemplo más claro lo tenemos con los antibióticos, los cuales son comprados en algunas farmacias según los antojos del paciente, a veces, y en la mayoría de los casos sin ser necesarios, comprando antibióticos de una potencia mucho mayor a la necesaria, tomando el tratamiento por menos tiempo del indicado. Lo más importante es la consecuencia de resistencia que esto conlleva, que está llevando a que estos pacientes ya no respondan ni a los antibióticos más potentes.

Otro punto importante es la falta de conocimiento que naturalmente tienen los pacientes de los medicamentos. Existen diversos grupos de medicamentos, en cada uno de estos, un mismo componente puede tener muchos nombres y presentaciones diferentes, pero al final son la misma molécula. Se presentan muchos casos en los cuales los pacientes al automedicarse, por ejemplo para un dolor, toman varios medicamentos diferentes, pero al final lo que estaban tomando era el mismo componente, lo que puede llevar a sobredosis y complicaciones serias, agravando mucho más a la persona, y sin lograr el efecto deseado.

Muchos otros ejemplos hay, pero lo más importante es hacer conciencia en la importancia de la consulta médica. No podemos perder de vista los pilares fundamentales del “arte de curar” que desde antaño los han constituido: la entrevista clínica, la minuciosa exploración del paciente y las recomendaciones aportadas por el profesional; sin los cuales el acto médico carece de sentido.

Dra. Jennifer Hernández Solís,
Médico de la Clínica de Urgencias P. Z.